Independientemente de que por ambos lados de mi familia haya una línea de maestras extensa, estoy totalmente segura que Dios quiso que yo también lo fuera.  Me encanta trabajar con niños y muchos me han preguntado las edades con las me gusta trabajar más; honestamente y no por presumir, sé trabajar con todo tipo de edades desde pre-maternal hasta adultos, pero la verdad los chiquitos de maternal son mis favoritos. Después que pasan el periodo de "!!MAMÁ!!" y lágrimas, babas y gritos sin cesar por 2 meses, se trabaja muy padre con ellos ya que se acostumbran al trabajo y a la rutina siguen la corriente en todo!  Si uno dice: "foto, foto!"  todos corren y posan...jajaja

Uno como educadora, debe tener muchas energías para estar brincando y cantando con ellos.  Una vez estábamos en el gimnasio de estimulación temprana y todos tenían que bailar al trenesito al ritmo de la música.  Yo estaba guiándolos, cantando y saltando cuándo de pronto, la maldición de los Camareno se hizo presente....tobillos delicados....salí rodando al piso cual llanta (ya que en ese entonces estaba muy gordita) y de inmediato...como fichas de dominó, todos mis niños se dejaron caer también.  Jajajaja para que vean que bien obedecen a su maestra!  Épico!